Tradicionalmente, desde que existe el mundo de la publicidad, durante los tiempos de crisis los mensajes de las marcas y empresas han tendido a volverse más cercanos, con la intención de llegar ya no al cliente sino a la persona, y lograr transmitirle sentimientos de ánimo, alegría, esperanza o solidaridad…
Es una forma de que una campaña publicitaria no pase desapercibida y no sea rechazada por el consumidor, lanzando un mensaje que logre que los usuarios se identifiquen contigo a través de la idea que les transmites, y dejando a un lado tu producto e incluso tu imagen empresarial, para centrarte en el sentimiento, mejorando así tu reputación online y la imagen de tu empresa, al alejarte del modelo publicitario agresivo cambiándolo por uno con mensaje más profundo y sutil.
Eso es el marketing emocional, y en los últimos meses muchas marcas han optado por orientar en ese sentido sus campañas de video marketing, ya que no hay nada mejor que un vídeo para transmitir emociones y sentimientos. Una buena campaña de video marketing emocional puede llegar a tener enorme éxito en las redes sociales, y muchas veces para lograrlo no hace falta un presupuesto enorme sino una buena idea, y un poco de sensibilidad para desarrollarla.
Y como para muestra vale un botón, aquí os dejamos la campaña de video marketing emocional que hizo Dove esta primavera y que trata sobre la baja autoestima, (un tema que refuerza el mensaje de su marca y le posiciona positivamente respecto a sus potenciales consumidoras) y que consiguió más de 500.000 visualizaciones en Youtube en sólo tres semanas.
Es el éxito del video marketing emocional…